Alberto Rivas presenta su nuevo trabajo: TABARCA.ELLA

Alberto Rivas

 
Alberto Rivas es un hombre del Renacimiento, artista polifacético que ha expresado a través de la pintura, la fotografía, el cine y la moda, un mundo intimista donde el genio y la locura se dan la mano, mostrando miedos, obsesiones femeninas, fantasmas de soledad, decadencia... como si una musa destronada por el paso del tiempo, reivindicase su aquí y ahora. Así es la obra de Alberto Rivas.... pasión desmedida.

El fotógrafo Alberto Rivas recorre, con diez desnudos, la soledad de una isla y lo onírico de sus paisajes en la exposición 'Tabarca.ella'


Alberto Rivas es un hombre del Renacimiento, artista polifacético que ha expresado a través de la pintura, la fotografía, el cine y la moda, un mundo intimista donde el genio y la locura se dan la mano, mostrando miedos, obsesiones femeninas, fantasmas de soledad, decadencia... como si una musa destronada por el paso del tiempo, reivindicase su aquí y ahora. Así es la obra de Alberto Rivas.... pasión desmedida.
 
En esta ocasión Alberto Rivas nos presenta su último trabajo. La exposición de fotografía 'Tabarca.Ella', llega al centro de arte contemporáneo Las Cigarreras. Esta exposición fotográfica se inspira en la figura de Penélope esperando a Ulises y el costumbrismo más cercano de los hombres que buscan la vida en alta mar.
 
El mito de Penélope cuenta como esta mujer espera la vuelta de su marido Ulises y para mantenerse fiel, teje un manto con el que se excusa de sus pretendientes, deshaciendo lo tejido durante el día por la noche, durante veinte años, hasta la vuelta del héroe troyano.
 
A este concepto, Rivas ha añadido la soledad de la vida dedicada al mar, donde «el marinero pasa solo días pescando y su mujer esperándole. Incluso si queda viuda, sigue así», explicó el alicantino.
 
El resultado: diez desnudos en diferentes paisajes se acercan a lo «onírico y pasional» de los conceptos y se aleja de la «sensualidad vacía» del desnudo de revista, a través de una sábana que tapa el rostro de la modelo en algunas piezas.
 
«La idea surgió de casualidad, en las pasadas vacaciones en Tabarca. Una amiga se cambiaba el bañador y me vino la idea. Le dije que se tapara el rostro con un espejo y a partir de ahí, hicimos la colección», afirmó el fotógrafo, a lo que añadió «el problema fue el desnudarse en agosto en la isla, ya que había gente. Para ello, nos tuvimos que levantar a las cinco de la mañana o utilizar espacios de difícil acceso al atardecer». También concretó que las diez fotografías expuestas son un parte de las sesenta que completan todo el trabajo.
 
Artículo extraído de masquesalud.com

NODO 10.09.1945 Nº140A